( Marie Christine Barrault-Trintignant-Eric Rohmer- Ma-nuit-chez-Maud)
Acabo de soñar una mujer de ensueño.
Era muy alargada hacia arriba y muy buena y blanca por dentro; ello por no contar lo hermosa y radiante que parecía por fuera. Una verdadera perla de Oriente. Su piel era fragante y alegre como el jazmín andaluz.
Estaba yo soñando con esa mujer de ensueño, cuando me quedé sin tiempo para diseñar sus piernas y sus pechos, mas… ¡cuán albos y firmes iban a ser!
Mientras duraba mi soñarrera con la mujer de ensueño, ella sonreía para mí y callaba para mí. Con sus mañas, ella apartaba a los otros, me traía libros con poesías y dibujos, me guardaba el sueño y, sosegadamente, me hacía estar tranquilo y contento.
Mujer ensoñada: ¡nunca te pondré en el olvido!
Seguro que mientras las sigas soñando estará contigo amigo mío
ResponderEliminarUn beso de ensueño
Ten cuidado; podría el árbol taparte el bosque. Cómo competir con una mujer de sueño... Pero te advierto que tienen sus ventajas las de carne y hueso. Besos.
ResponderEliminarCon esa descripción, la mujer de tus sueños no tiene más de treinta años, por no decir veinteañera.
ResponderEliminarLa perla blanca, qué bonita manera de invocarla, un ángel que guarda tu sueño.
el sueño puede que te lleve a la realidad,o al menos acercarte
ResponderEliminarsaludos
¿Te olvidaste del humor? Resulta muy útil cuando el resto se desdibuja. Bs.
ResponderEliminarCon un sueño así hay que prepararse para actuar después de utilizar el filtro de la razón.
ResponderEliminarEl color que le imprimes, la apariencia física y las impresiones poco racionales son buenos indicadores de que sigues en busca de esa mujer ideal, alta como un ciprés, que ha despertado en ti sentimientos de atracción. Casi seguro que te sonríe, te mira directamente a los ojos, siempre está de buen humor, nunca tienes con ella fricciones y no te escuece con culpabilidades....es perfecta.
Que penita que mi sombra no sea alargada.
Amigo Manuel María no será esta mujer soñada por ti... la primavera que ya esta aquí y te ha sorprendido en sueños con su primavera blanca de alma de luz y amor en flor para ti...
ResponderEliminarUn abrazo fraternal de MA y feliz día primaveral desde Granada la bella.
La imaginación y la ensoñación alimentan el espíritu de los que escribimos o contamos historias. A veces los sueños se hacen realidad Manuel María, completa este sueño para que puedas encontrar esa mujer perfecta ensoñada.
ResponderEliminarUn saludo paisano,
María Eva.
Las mujeres de ensueño, no existen según mi hijo. Para mi marido sí, que soy yo...¡faltaría más! A las mujeres de ensueño, de piernas firmes, cintura de avispa, etc...Luego hay que comprarles un buen libro de cocina. Claro que si era blanca por dentro...Eso es que era completita, buena. Si la encuentras, avisa para que mi hijo te haga competencia que solo las ve en sueños también.
ResponderEliminarEres un romántico empedernido.
Carmen Sabater.