De madrugada, unos minutos después de quedarse a solas, él mandó a ella un mensaje de texto:
-Confundiste mi gesto de cariño y giraste la cabeza para ofrecer, tan solo, tu mejilla.
Ella contestó en cosa de segundos:
-Mi mejilla estaba deseosa de cariño. Te acercaste y ella sola se ofreció a recibirlo.
El hombre cerró los ojos para pensar en ella y preguntarse: ¿ternura o deseo?
La mujer, ya a oscuras, se durmió pensando: ¿deseo o terneza de amigo?
( fotos cortesía de una amiga que piensa con su frente fruncida )
Ternura.
ResponderEliminarSeguramente , después de la ternura, surge el deseo.
¿O es antes?
La terneza ...¿no vale más que el deseo?
Lindo post.
Abrazo.
¡Gracias Carmela! No lo sé...supongo que la ternura es más sostenible y ucrónica que el deseo...¡vaya usted a saber!
ResponderEliminarAbrazo y firmo.
En un mensaje de texto se condensó la república del deseo.
ResponderEliminarSalud
Francesc Cornadó
Amigo Francesc, así es, a veces. Los sms pueden ayudar a escribir sin las "arrugas del estilo", que son los adjetivos y los adverbios. Gracias.
ResponderEliminarSi duda ternura, lo otro pa'luego
ResponderEliminarMis besos sin recíbelos donde a tu más quieras...
Ternura, terneza, deseo...¡Gracias 40añera, amiga!
ResponderEliminarSon sentimientos encontrados de afecto de los dos, él y ella después del mensaje de texto soñaron con la ternura y el deseo o el deseo hecho ternura con dulzura de amor.
ResponderEliminarPreciosa entrada de post me encanto leer Crónica de un gesto.
Feliz y dulce noche amigo.
¡Gracias MA, compañera! Supongo que también influye mucho la "trampa" del lenguaje...Abrazos
ResponderEliminarLos sentimientos son igual que ráfagas inestables, vienen, van y cuando menos lo piensas; se quedan!
ResponderEliminarTernura y deseo... ¡Llaman a buena suerte!
¡Un abrazo!
Amigo Manuel,
ResponderEliminarQuizá haya una "trampa" de lenguaje pero no una " arrière pensèe ".
Me ha gustado..
Un abrazo
Maite
¡Gracias Susi! Que la buena suerte sea contigo y te colme de ternuras y deseos...
ResponderEliminar¡Muchas gracias Maite! A ti te envío rosas de Alejandría y un abrazo fuerte.
ResponderEliminarY por qué no ambas cosas?
ResponderEliminarEs tan hermosa la ternura después del deseo!!!
Mi beso tierno.
Claro,María,claro. Sin embargo, la jurisprudencia entiende que,con frecuencia,el hombre tiende al desapego, una vez satisfecho su deseo ¡A mí,que me registren!
ResponderEliminarBeso anfibológico