jueves, 27 de enero de 2011

La piel de su voz


( foto Anatoly Kalugin )

Cuando voz y acento conmueven no es preciso hablar,
basta la piel con sus silencios.
Cuando acento y voz no estremecen
es imposible hablar con quien quisiste y ya no.
Pregúntale a ella, que aún te ama, si prefiere tu piel o tu palabra.
Pídete cuentas a ti mismo, cuando amas, qué elijes de ella:
su voz de miel o sus pezones erectos.
Nosotros dos, de un amigo que ya no lo es, rehuimos su eco.
No hallo manera de hablar y amar.
Ni de odiar y hablar.
Ni tan siquiera la forma de hablar desde el limbo del desamor,
cuando el amor ha muerto, en la acción, para la palabra.

7 comentarios:

  1. Qué genialidad:" Pregúntale a ella"
    es verdad que cuando el amor se va, el resquicio que permanece es todo y es nada.
    Hablar o amar...

    ¡Saludos desde Galicia!

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  2. Me he quedado....para la piel con sus silencios. Precioso.

    Yo

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  3. Mis felicitaciones amigo Manuel por tu hermoso y profundo poema:La piel de su voz.
    Un canto alegre al amor y un canto triste al desamor son tus versos, la miel y la hiel del amor en sus dos estados.

    Yo me quedo con estos versos.
    Cuando voz y acento conmueven no es preciso hablar, basta la piel con sus silencios.

    Abrazos de MA para ti desde Granada.

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  4. Yo hoy me quedo en silencio , pero mirándote.

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  5. Susi,Andri,MA y Duna,hoy prefiero visitar y comentar en vuestros blogs, en homenaje a vuestra amistad y cariño verdadero. Sí, ese que ni se compra ni se vende...¡Olé!

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  6. Seguramente es mejor dejarte un profundo y cariñoso silencio tras la piel de su voz y la voz de su piel.
    Un beso entre silencios...

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  7. Encuentro la puerta entreabierta y me cuelo en tu casa y me quedo callada con tus letras.

    Te felicito.

    Un saludo

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